El dinamizador comunitario como agente clave en las actividades de ocio y tiempo libre

La educación a lo largo de las décadas, mantiene el objetivo de compartir estrategias y plantear nuevos escenarios de acción aquí es donde interviene el dinamizador comunitario partiendo, fundamentalmente, de tres ejes que son el territorio como espacio humano de convivencia, la interdisciplinariedad y la movilización social.

El dinamizador comunitario como agente clave

El reto de la educación es tratar de crear comunidades educativas que cooperen, que participen y donde todos sus miembros sientan que pertenecen y que además, contribuyen. La clave está en el desarrollo de una ciudadanía comprometida, y es aquí donde la figura del dinamizador social, juega un papel muy importante.

 

Las actividades de ocio y tiempo libre están íntimamente ligadas a las competencias y capacidades que el dinamizador adquiere para motivar la participación comunitaria, utilizando como elemento de nexo la educación.

 

El dinamizador comunitario se encarga de programar, organizar, dinamizar y evaluar actuaciones de intervención social encaminados al desarrollo de la participación ciudadana.

 

El ocio favorece la interacción, la participación y la cooperación entre los miembros de una comunidad, el disfrute que llevan implícitas las actividades de ocio, contribuyen de manera positiva a crear un clima de comunidad próxima, cercana y colaborativa. Entre las contribuciones más significativas que el ocio ha proporcionado a la comunidad tenemos:

 

  • Su proximidad y conexión con el territorio: Diseñar propuestas de ocio educativo desde la perspectiva de una pedagogía activa, donde todo los agentes implicados en la comunidad participen, fomenta el desarrollo de actividades de educación y retroalimentación comunitaria. La figura del dinamizador comunitario adquiere una gran importancia, ya que tiene la posibilidad de crear programas que se ajusten a las necesidades concretas de una comunidad y que pueda extrapolarse y adaptarse a otras comunidades.

 

  • Libertad de adhesión y voluntariedad de las personas en la utilización del ocio: Las entidades socioculturales y educativas, como espacios libres, informales y no intervenidos, pueden convertirse en espacios idóneos para la dinamización de los barrios y de los territorios.

 

  • La intención educativa, la pedagogía del proyecto y las pedagogías activas: A grandes rasgos, la intención educativa se entiende como el proceso de acompañamiento en el desarrollo integral de la persona.

 

La pedagogía del proyecto permite a cada miembro de la comunidad convertirse en el protagonista de todo el proceso de la propuesta de ocio, animando a que descubra, participe, realice y analice su intervención dentro del programa. El dinamizador comunitario adopta un papel de acompañante, de guía, procurando motivar a todos los miembros durante el proceso.

 

La pedagogía activa es la corriente pedagógica que caracteriza la educación en el ocio en la que la persona se educa a partir de la acción, actuando y haciendo simulación de la vida cotidiana, lo que le facilita el proceso de aprendizaje y también le potencia el proceso de socialización.

 

  • La movilización y la iniciativa social, la promoción del asociacionismo y la participación: Es un espacio donde se comparten ideas y se aprende a valorar, respetar y empatizar con el resto del grupo. A través de las propuestas de ocio y tiempo libre comunitarias, el dinamizador no es el único que toma decisiones, sino que todos los participantes poseen voz y voto, sin embargo, es aquí donde el dinamizador comunitario tiene la gran responsabilidad de ejercer como moderador, favoreciendo el clima de diálogo y consenso.

 

La función de un dinamizador comunitario no se basa únicamente en animar a la gente, sino en el poder hacer un estudio previo de la población con el que poder conocer cuáles son las necesidades que tienen y a quien deben ir dirigidas, para fomentar su participación.

Artículos relacionados:

Seguridad online: 10 consejos para proteger tu identidad

En la era digital actual, la seguridad online es prioritaria ya que Internet se ha convertido en una parte fundamental de nuestras vidas.

Medir el aprendizaje: la evaluación del proceso de enseñanza

Medir el aprendizaje es un aspecto crucial de la formación. La importancia de la evaluación del proceso de enseñanza es transcendental para que los educadores y estudiantes alcancen sus objetivos con seguridad.

Terapia del dolor: un enfoque integral para el bienestar

La terapia del dolor es un campo de la medicina que se dedica a evaluar, diagnosticar y tratar el dolor de manera efectiva.

×